Pekín condena aumento de aranceles anunciado por Claudia Sheinbaum y acusa a México de ceder ante EE. UU.

El Gobierno de China reaccionó con dureza al anuncio de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien propuso incrementar hasta en un 50% los aranceles a la importación de automóviles procedentes de ese país, con el objetivo de proteger la industria nacional.

El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Lin Jian, calificó la medida como una “concesión ante la coerción de Estados Unidos” y aseguró que Pekín “defenderá decididamente los derechos e intereses” de sus empresas.

La propuesta de Sheinbaum, que aún debe ser aprobada por el Legislativo, se enmarca en el Plan México para fortalecer la producción interna y blindar los más de 320,000 empleos en riesgo por la entrada de autos y productos a precios más bajos. Además del sector automotriz, la medida impactará a la industria textil, siderúrgica y química, así como a importaciones de otros países sin acuerdo comercial con México, como India, Rusia o Corea del Sur.

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, rechazó que la decisión tenga motivaciones geopolíticas: “No es un pretexto, es el sistema comercial”, dijo, al subrayar que la medida está respaldada por la Organización Mundial del Comercio.

Sheinbaum aclaró en su conferencia matutina que no busca un conflicto diplomático: “Queremos dialogar sin generar tensiones, explicando que la medida tiene que ver con el fortalecimiento de nuestra economía”.